El campamento de Alto del León 2022 ha sido único. Nos ha ayudado a conocer a gente nueva y hemos aprendido muchas cosas, gracias a las actividades que hemos hecho junto a los monitores y compañeros de este centro. Hemos vivido muchas experiencias que nos han hecho comprender la vida cotidiana mejor que nunca, y nos han unido más a nuestros compañeros.
Pero no solo nos hemos divertido, también hemos ayudado en las labores del campamento como: limpiar los baños, ayudar en cocina, recoger la basura del terreno para no contaminar, barrer el comedor para que no queden restos de comida… Además el equipo de cocina, “el equipo 0”, nos ha alimentado y cuidado bien durante estos magníficos 13 días.
Estos días nos hemos dado cuenta de lo hermosa que es la naturaleza, gracias a los tres días que pasamos en la marcha. El primer día estuvimos en un precioso embalse en Madrid, algunos aprovechamos para observar la fauna del lugar como las ranas, vacas, toros, ¡o incluso una serpiente! El segundo día fue duro pero la recompensa valió la pena, una piscina bien fresquita. Y el último día pensábamos que no lograríamos subir la montaña pero junto a los monitores y los compañeros conseguimos superarlo y llegar al fin al campamento.
De normal en todos los campamentos del centro juvenil hay una experiencia única que nos enseña que el miedo a veces es bueno, la conocida “noche de miedo”, una noche en la que nuestros compañeros de rojos nos dan sustos acompañados de historias.
En resumen, este campa ha sido inigualable y nos gustaría repetir durante muchos más años ¡GRACIAS!
Escrito por Lucía Varón y Sara García (destinatarias de Verdes)